Sólo apto para rayaos de la vida. Os lo pongo porque también lo puse en hojaldre y allí le han hecho poquillo caso xD
La Muerte, Esa Gran Falacia.
El pobre de Juan estaba tendido sobre la camilla del hospital, viviendo sus últimos minutos. Todos en la habitación eran conscientes de que la muerte de Juan era cuestión de tiempo, y no de mucho. Todos, menos uno. El médico, dada su gran experiencia en su campo no tenía la más mínima duda de que el cáncer que le había arrastrado hasta esa camilla tras dos largos años de lucha no iba a revertir. Su todavía joven mujer, su madre viva; con lágrimas en los ojos no dejaban de pensar que serían los últimos momentos en que podrían verlo con vida. Sin embargo, Juan tenía otro punto de vista. Juan no creía que fuese a morir. No podía explicar de dónde salía tal certeza, o de qué imposible manera física iba a resultar algo aparentemente imposible, pero estaba totalmente seguro.
Dos años antes, cuando le comunicaron lo extendido de su cáncer, Juan tuvo mucho tiempo para empezar a asumir su propia muerte. Sin embargo, la tarea de asumir el fin de su existencia parecía exigirle que antes pasase por definir lo que en efecto era esa existencia. El primer análisis que hizo fue decidir si podía estar seguro de que realmente él existía. Decidió que sobre eso no podía dudar (o al menos no le servía de nada hacerlo) Una vez aceptada su existencia, ¿cómo afrontar el final de ésta? Para ello, Juan debía asumir la enorme tarea de determinar la naturaleza del mismísimo universo, de lo que nos es conocido, de todo lo que decimos que "existe" Al hacerlo, Juan elevó su mirada hasta las galaxias más lejanas, y la bajó después hasta las partículas más pequeñas. Todo aquello era el universo. Pero centrándose en ello no alcanzaría ningún tipo de conclusión. ¿Cómo abordaría Juan la naturaleza del universo si la mayoría de lo que conocía de éste le llegaba a través de intermediarios? Y entonces fue cuando Juan tuvo que cuestionar la existencia del universo; y decidió resolver primero esta cuestión antes de analizar su naturaleza, porque ¿cómo analizar algo que ni siquiera sabemos si existe o de qué forma lo hace?
La única forma de entender la existencia del universo, o al menos la única que se le ocurrió a Juan, es analizar la forma en que ese universo era conocido por él. Juan podía mirar un objeto, y estar seguro de que existía porque lo estaba viendo. Sin embargo, Juan podía tener 41 de fiebre y estar viendo cómo las ventanas se torcían en una sonrisa. De hecho, de forma aún más simple, Juan podía cerrar los ojos y el objeto dejaría de existir, al menos a efectos visuales. Pero claro, el objeto seguiría allí aunque él cerrase los ojos ¿O quizá no? Decidió extrapolar su análisis al resto de sus sentidos. Durante el sueño, Juan percibía un universo distinto. La costumbre le dice que este universo de los sueños es falso. Él lo asume porque este universo no tiene la continuidad del otro, el que acostumbra a llamar "realidad" Pero ¿qué hay de esa realidad cuando Juan duerme? Nada, Juan durante el sueño vive en otra realidad distinta, alterable por su mente de forma absoluta. Sin embargo la base es la misma. Si bien este universo "realidad" es menos voluble y más constante que el otro universo "sueños" a fin de cuentas son lo mismo, porque el estado mental de Juan influye directamente sobre su naturaleza o su forma, e incluso sobre su existencia.
De modo que a Juan no le quedó otro remedio que aceptar el hecho de que lo que él llama realidad, si bien no es totalmente controlable (al menos a priori) no es algo ajeno a él, sino que esta realidad y él son una misma cosa. Y si él puede influir directamente sobre ella, y puede hasta hacerla desaparecer a su antojo, la realidad no es otra cosa que una parte de Juan que hasta ahora no había sido capaz de reconocer. Pero en el concepto de realidad se incluye a los seres queridos de Juan, a su perro, al pescadero, y a su bigotudo jefe. De modo que la tristeza que le causa una discusión con su mujer no es distinta de la tristeza que le causa una depresión crónica de causas meramente fisiológicas.
Entonces es cuando volvemos al lecho de muerte de Juan. Hemos llegado a la etapa final de su análisis. Una vez descubierta su naturaleza, y las fronteras de su existencia ¿De qué forma podemos analizar el fin de esa existencia? Las radiografías muestran una masa enorme cancerosa que le consume por dentro. Bien, Juan puede cerrar los ojos y las radiografías dejarán de existir a todos efectos. Sus llorosos familiares y el médico de aspecto grave pueden desaparecer con la misma facilidad. Esto es así porque lo que Juan conoce de las radiografías o de los familiares no son más que percepciones suyas. El dolor que siente Juan en su interior es algo sobre lo que no parece poder influir directamente. Sin embargo, según vaya perdiendo el sentido, el dolor disminuirá gradualmente hasta desaparecer. Y cuando desaparezca, no le quedará prueba alguna de que tiene cáncer. Y si no tiene cáncer no va a morir. Es él el que influye sobre las percepciones y no las percepciones las que influyen sobre él. Un cáncer que no puede percibir no existe, no se puede tener conocimiento de él. Y si el cáncer no existe, algo que no existe no puede acabar con su existencia. Por eso Juan es el único de la habitación que no cree que vaya a morir.
Una vez alcanzada esta certeza, Juan cerró los ojos y notó cómo el dolor desaparecía. Estaba curado, de una u otra forma.
(sí, sé que mi padre escribe cosas más molonas, no en vano me saca 38 años de práctica)
Parece más unas reflexiones en forma de relato que otra cosa. ¿Puedo intuir cierta influencia de "Las meditaciones metafísicas" de Descartes? Tiene muchas cosas parecidas.
Precisamente viene a señalar el gran "error" de Descartes.
Si asumes que tu propia existencia es cierta porque puedes pensar y que el resto son percepciones que no puedes demostrar; la muerte deja de tener sentido.
Cita de: Sandman en 17 de Agosto de 2008, 02:57
Precisamente viene a señalar el gran "error" de Descartes.
Si asumes que tu propia existencia es cierta porque puedes pensar y que el resto son percepciones que no puedes demostrar; la muerte deja de tener sentido.
Bueno, yo no creo que tenga mucho sentido. Se lo pone nuestra cultura. Pero volviendo al tema del relato, me gustó sobre todo el final ;).
Sólo hay dos posturas posibles.
Aceptar la visión de Descartes y negar nuestra propia muerte o aceptar el hecho de que vamos a morir, lo que tendría como consecuencia que las percepciones no son otra cosa que reflejos de una realidad que afecta a nuestra existencia.
Yo me decanto por la primera, al menos hasta que muera.
Buen relato.
Me recuerda a los que nos contaba mi profe de religión en 4o de la ESO y bachillerato (que siempre le gustaba relatos de los que hacen pensar... de hecho la mitad de las clases trataban sobre hacernos pensar más que de lo que ponía en el libro ese). :)
Mola. Y has mejorado bastante.
Cuando me haga ultrafamoso por mi teoría filosófica de los dos mundos (nada que ver con Platón), pues te nombraré como influencia.
En cualquier circunstancia leer que he mejorado bastante me molaría, pero joder, cuando el relato que más te curras es mediocre y el que menos resulta que es mejor lo primero que haces es desconcertarte xD
Debo decir que no he leído ningún relato anterior tuyo, esta bastante bien el relato-reflexión.
También debo decir que no estoy familiarizado al completo con Descartes, supongo que la muerte es el ciclo natural de todo y todos nosotros, es nuestro destino no una simple percepción (porque hasta que no muera el individuo, no dejara de percibir que esta vivo).
Entonces entramos en que la vida, nuestro pasado, presente y futuro es nuestra simple percepción del mundo, una vez muertos, dejara de serlo.
Yo pienso que nuestra vida es mas que una simple percepción, pero vamos que en temas filosóficos estoy verde (así que dudo poder rebatir, mis extrañas ideas).
Basicamente eliges la opción de creer en la muerte. Sin embargo, si sólo crees aquello que puedes demostrar, la muerte no tiene cabida. Somos inmortales hasta que se demuestre que el universo es más que una percepción.
El otro día me pareció un truño increíble, pero hoy me ha encantado. Felicidades Sandy.
Bueno, a fin de cuentas un relato es como todo, hay que leerlo en las circunstancias adecuadas.
Puedes echarle azúcar a un yogur natural y te parecerá muy rico, pero si le echas el azúcar a un filete la cosa ya cambia xD
Pobre Juan, al final se muere :_
¿Se muere?
Sí, se muere :_
No se sabe.
Para los de fuera se muere, pero si los de fuera son percepciones suyas entonces no muere.
He dicho que se muere X(
No le veo demasiado sentido al decir que "no te mueres". No sabes si te mueres, de momento, porque no has llegado hasta ahí. Pero si desaparece la única existencia que tú percibes(que eres tú), significa que te mueres, ¿no? Yo así lo veo aunque es imposible de determinar dado que nadie volverá aquí para contarlo, y si volviese nos daría igual, ya que yo considero que soy lo único que estoy seguro que existe, por lo que los comentarios de un "robot" no pueden ayudarme en la percepción de mi existencia. Cuando llegue el momento y vaya a finalizar tu vida, sabrás si desapareces o no.
Y cómo sabes que desapareces tú, si no te puedes sentir porque has desaparecido.
Cita de: Psyro en 04 de Septiembre de 2008, 12:03
Y cómo sabes que desapareces tú, si no te puedes sentir porque has desaparecido.
Cierto, no lo había visto de esa manera. Aunque que no lo sepas no quita el hecho de que te mueras. Si desapareces, es que te has muerto, seguramente no siga una consciencia voladora por el mundo. No sé cómo lo veréis, pero para mí eso es morirme. Aunque no sepa que me muero, si muero, no me deja vivo, estoy muerto.
Coño... ¿se te pude dspedazar? :P
Nah a ver, es bueno. Pero me ha resultado curioso que te centres en la reflexiones ante la muerte y hayas dejado los sentimientos del personaje tan en segundo plano, no se si me vas a entender, pero parece que tenias mas que decir que que contar. Lo malo... repasa la puntuacion sobre todo al principio... (dijole la sarten al cazo). Y plis Sandman... ¿Como decias que se llamaba el prota?... Te has pasao una mijina que dicen en mi tierra... Las dos veces que he leido relatos tuyos me ha pasado igual, lo tuyo es vicio por los nombres propios macho :P
Yo cambiaria el final.
pues.. como estudiante de ingeniería, Descartes me parece un pirucho.. xD..
pero el relato me gusta, salvo al principio, cuando dices 2 veces "imposible" medio seguidas y confunde..
Pse, escrito rápido y apenas revisado una vez.
No era relato para duelo ni para CIRCO, por lo que no lo cuidé nada. Lo que me importaba era transmitir la historia, no tanto la calidad literaria. Con esto quiero decir, que me critiquéis la historia, que mis defectos escribiendo los conozco de sobra.
pues.. salvando eso... me gusta :wink:
Al final debería haber muerto.
Cita de: Psyro en 18 de Agosto de 2008, 23:20
Mola. Y has mejorado bastante.
Cuando me haga ultrafamoso por mi teoría filosófica de los dos mundos (nada que ver con Platón), pues te nombraré como influencia.
y como ejemplo pondras un tio atado en una cueva que solo ve las sombras de la entrada :O
El relato es entretenido aunque llego a pensar que eltio lo que tenia era un trastorno mental